Por Miguel Ángel Gómez Polanco
Óscar, nombre de la estatuilla cuyo origen se remonta al año 1929, en el que se premió como la primera “Mejor Película” de la historia de este comercial evento a la cinta “El Cantante de Jazz”; celebrará mañana su entrega número 83 ante un mar de incertidumbre que la mayoría festeja, toda vez que en años anteriores la “línea” marcada por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas –encargada de reconocer a lo mejor del cine hollywoodense- se podía ver reflejada en el espejo de las premiaciones que anteceden a esta, como los Golden Globes, BAFTA, SAG Awards, etc.
Pero esta ocasión, mis queridos y fieles cinéfilos alborotadores –como su servilleta-, la cosa pinta mucho mejor. Una aparente disputa interna en la Academia, basada en las preferencias hacia los materiales non-american que algunos integrantes ésta han expresado; podría darle el traste a este evento y devolverle un poco de la credibilidad que ha perdido en los últimos tiempos.
Por esta razón y también por primera vez en la vida de este panfleto llamado Cinevasivas, me atreveré a dar algunos de los principales pronósticos para esta gala que tendrá lugar, como desde hace diez años, en el coso teatral de Highland: el Kodak Theatre. Pero antes de llegar al punto de explotar mis dotes videntes con ustedes, quiero dejar claro que aunque la ceremonia cuenta con un total de 24 categorías; en este espacio sólo se abordarán las más conocidas y que de alguna manera, han causado mayor polémica respecto al trayecto que llevan recorrido en esta temporada de premiaciones. Dicho lo anterior y ya entrado en estado catártico y clarividente, vayamos pues a las predicciones:
83: probablemente una de las entregas más emocionantes de los últimos tiempos |
El rubro de “Mejor guión original”, para un servidor la pelea estará entre The Fighter (El Peleador) e Inception (El Origen), dejando a The King’s Speech (El Discurso del Rey), Another Ray y The Kids are all right (Los Chicos están bien) para categorías de mayor importancia. Mi apuesta: Inception. La maraña psicológica que les llevo 15 años en acomodar a Chris Nolan, podría además resultar el premio de consolación a este que además escribe, después de ser apartado –para muchos injustamente, incluido yo- en el rubro de “Mejor Director”.
“Mejor guión adaptado”; sin lugar a dudas, debe ser para True Grit (Temple de Acero) y el armonioso trabajo de los hermanos Coen, quienes hicieron una adaptación y remake de las versiones literarias de 1968 y cinematográfica de 1969, respectivamente, sencillamente magistral. El pero en esta categoría podría ser lo apartados que tiene la academia a este par de hermanos en la premiación, por lo que si esa tendencia no cambia, la estatuilla podría quedarse en manos Aaon Sorkin, con su notable habilidad para acaparar la atención en los diálogos de The Social Network (Red Social)
“Mejores efectos visuales”. Si bien la combinación de nominados está variadita respecto al género que pertenecen; mi apuesta es nuevamente con Inception. La sutileza de labor visual con la que cuenta y que es en lo absoluto impactante (sobre todo si la viste en IMAX) podría dar la sorpresa, aunque haría mal descartando a Harry Potter ADH Parte 1 y Iron Man 2; cintas que encajan en las preferencias de Hollywood y que además son Blockbusters totales. Hereafter (Más allá del cielo) descartadísima, pues aunque no es mala, la Academia no estuvo muy de acuerdo con la incursión de Clint Eastwood en estas temáticas.
“Mejor música original”. A Black Swan (El Cisne Negro) lo sacaron de esta categoría pues la música compuesta por el extraordinario y esquizofrénico Clint Mansell basó sus partituras en las de Tchaikovsky, para dar lugar a enfermizas melodías. Por lo tanto, Inception está descartada también, pues confiando en que se mida –casi- con la misma vara; esta cuenta definitiva referencia a la música de Edith Piaf, en quien Hanz Zimmer reveló su inspiración. Me voy con Alexandre Desplat y su emotiva composición de The King’s Speech.
“Mejor película en lengua extranjera”. Quien lo dude está mal. No por estar dirigida por un mexicano desdeñado por la Academia en varias ocasiones, puedo asegurar que este rubro será para él. Biutiful será la ganadora y sólo si algo raro sucede, el premio se iría a Grecia con el claustrofóbico y controversial drama Dogtooth.
“Mejor fotografía” será desde mi lógica, para Matthew Libatique por Black Swan. El estupendo manejo de cámaras, sobre todo en las secuencias de baile, hace del trabajo de este inseparable de Darren Aronofsky el indicado para el premio. Asimismo, en el apartado de “Mejor Vestuario” podría hacérsele justicia a Disney con su versión Burtoniana de Alice in Wonderland, aunque The King’s Speech cuenta con una basta preferencia del público en ese rubro. Me voy con la segunda.
“Mejor película de animación” ¿qué se puede decir? Toy Story no tiene a nadie que le haga sombra. Caso contrario al de “Mejor dirección de arte”, en la cual intervienen cinco películas con amplias posibilidad todas para lograrlo. Sin embargo, yo pienso que la cosa estará entre The King’s Speech y True Grit; ambas con una calidad espectacular en este tema, que definitivamente tienen mucha importancia en el ambiente de sus escenarios.
Y ya aproximándonos al final, llegamos con los que probablemente son los galardones más esperados: actrices y actores de reparto, principales, mejor director y mejor película. En la Actriz de Reparto, aunque Amy Adams ha demostrado ser una excelente histrión; su poca experiencia podría limitarla a pesar de su emotiva participación en The Fighter, así que mi apuesta va con su contrario en trayectoria: Melissa Leo por The King’s Speech. En el mismo rubro, pero masculino; la competencia definitivamente la tiene ganada Christian Bale en The Figther. Su más próximo perseguidor, desde mi gusto, es Mark Ruffalo por The Kids are all right, pero probablemente no le sea suficiente, no obstante que el segundo es un actor que empieza a ser normal verlo si no nominado, por lo menos considerado para estarlo.
“Mejor actriz”, no hay discusión: Natalie Portman por Black Swan. La actriz de origen israelí vuelve a restregarle en la cara a la Academia que es la mejor de su generación y con una juventud que probablemente la conduzcan a ser una nueva Meryl Streep. “Mejor actor” ¡Vaya dilema! Pues Jeff Bridges sería el merecedor natural del premio, por experiencia e impecable interpretación en True Grit. Sin embargo, apenas el año pasado fue quien obtuvo la estatuilla en esta categoría, algo que difícilmente la Academia permitirá que se repita. Luego, el laureado Colin Firth dejó claro en los BAFTA que su reconocimiento no era sólo un “premio temático” a razón de la trama de la película en la que participa, The King’s Speech. Pero con todo esto, yo creo que la Academia se irá por su “gallo gringo” para hacer frente a estos dos titanes, dándosela a Jesse Eisenberg por The Social Network. James Franco y Javier Bardem, sin posibilidades; se los firmo.
“Mejor director”. Para mí, la más importante. La voy a poner así: Aronofsky, el culto; Hooper, inicios prometedores; David Fincher, la reputación; hermanos Coen, el desaire; David O. Russell, las buenas relaciones. ¿Quién? Darren Aronofsky con Black Swan.
Y finalmente, “Mejor Película”, en la que el párrafo anterior podría –de nuevo- ser el factor definitorio. Todo quedará entre Inception, True Grit, The Social Network y Black Swan, de eso estoy seguro. Y el Oscar es para… The Social Network, para cerrar con broche de oro la mentalidad norteamericana de demostrarle al mundo que son los mejores, a través de una historia que narra la concepción del mayor fenómeno global de Internet, creado y desarrollado por un gringo que además, luce su espíritu capitalista en la cinta; el ingrediente ideal para ser elegida. Esas son las mías y este domingo 27 de febrero, veremos qué sucede.